El problema es que el sirope vende

En un disco de duetos por el que seguramente no va a ser recordado, Descemer Bueno asegura que “el problema es el amor, que parece tan difícil”. A su lado, Jorge Villamizar y El Chacal le hacen coros y continúan agregando que “prefiero morir que volverte a perder”.

No sé para ellos; para mí está clarísimo que el problema no es el amor, sino el mercado, que exige matrices cada vez más simples, cada vez más elementales para un público adaptado de antemano a la receta que vende. Y para responder a esas exigencias, más del bolsillo que de la inspiración, Descemer parece haberse entrenado en tiempo récord.

Todavía lo recuerdo hace algunos años, cuando era un mulato con dreadlocks que cantaba aquello de “yo lo que quiero es un carro para después que tenga mi casa, irme pa’ mi casa en mi carro”. De haber seguido en semejante cuerda estética y con mecanismos de promoción underground, probablemente hoy tampoco tuviera carro, ni casa, ni hubiera concebido esa fórmula para hacer canciones en dos días que bien pudiera patentar como el sirope Descemer.

Desde el disco Amor y música, que compusiera junto a Kelvis Ochoa y que conmueve de principio a fin; desde sus primeros hits, los más auténticos, hasta los remix de hoy ha llovido más de la cuenta. Tanto que, del más reciente fonograma, solo creo salvable el tema a dos voces con Carlos Varela titulado “Cero a cero”, una canción atípica en ese álbum pero que, en honor a la verdad, no se me ocurriría pedírsela a Varela en un concierto.

El problema es el mercado, repito. Y si no, que le pregunten a Shakira, que no ha vuelto a ser la misma de ¿Dónde están los ladrones?, para bien de quienes la siguen por sus condiciones físicas —despampanantes, estamos claros—, pero no tanto para quienes admirábamos sus habilidades vocales, ahora reducidas al sonido onomatopéyico y al waca waca. Tampoco es que debamos culparla: se vive mejor como la colombiana exótica, amantísima esposa de Gerard Piqué, que como la muchachita irreverente de la guitarra al hombro y de los pies descalzos.

Aunque para buscar ejemplos de creadores escurridos por el tragante del mercado tampoco hay que cruzar el Atlántico. Aquí mismo, no sé con exactitud si en Puerto Rico o en Cuba, Diana Fuentes se debate entre su antiguo apego por la canción inteligente, la que defendió en un memorable concierto hace unos años en el Teatro Mella, y su reciente desdoblamiento como el sex symbol de la fusión, incluido cambio de look, de proyección escénica y una creciente interacción con los fans en redes sociales. Ya casi ni recuerdo que cantó en Síntesis…

Y sobre Qva libre, ¿qué añadir? Obviando de golpe y porrazo que una vez fueron rockeros, los chicos de la actual agrupación debieran tener presente que la excentricidad no es un género musical, por más Lady Gaga y Pink y Madonna que haya en el mundo. Ellas, al menos, han probado ser más que vestuarios extravagantes y sombreros.

Así que no, Descemer, el problema no es el amor. El problema es crear para darle al mercado únicamente lo que el mercado quiere; meter en una coctelera las matrices exprimidas de siempre y zarandearlas bien, hasta que esté lista una canción que pase por nueva.

El problema —y los músicos deberían saberlo— es que el arte solo trasciende cuando hay sustancia de fondo, pollo en el arroz con pollo; las sopas instantáneas terminan aburriendo.

17 Comentarios Agrega el tuyo

  1. Luis Orlando dice:

    Hoy, casualmente, le respondí a un amigo de facebook que se quejaba de cómo Shakira ganó el Grammy a mejor álbum latino, con esto: Shakira, que hace tiempo dejó de ser Shakira.

  2. JorgeQC dice:

    Buenisima reflexion.

  3. camarero dice:

    joaquín sabina… 1998… el hombre del traje gris… «el rap del optimista»…

  4. JOSE dice:

    Es una falta de respeto al publico, independiente de donde vivan, «regalarle» asi como asi un Grammy a Shakira, que ni tiene album nuevo, ni voz, porque ya la ha perdido por un problema de salud. En todos esos premios latinos «lo que cuenta es el cash». Lo demas, es cuento y boberia.
    Ya ella no vive en Miami, sino en Barcelona, asi que se salio de la orbita de influencia de los Estefan, que hacen y deshacen en la industria musical en espaÑol, y todos, productores, compositores, arreglistas y cantantes, bailan a su compas lamentablemente.

  5. JOSE dice:

    El Rap y Regueton, que hoy gusta a una parte de la juventud, no es mas que un ritmo vulgar, «barriobajero», chusma y marginal, muy aparte el baile, que es «repello» en estado gaseoso. Mi hijo mas chiquito, de 15 aÑos, en casa no para de escucharlo para disgusto mio. No lo censuro porque tiene derecho a elegir sus ritmos favoritos, pero me encierro en mi cuarto para no oirlo. Mas verguenza siento por mi esposa, una cincuentona que se desarma cada vez que suena en la radio semejante música que degrada el dial a su minima expresion. Por suerte, la unica hija hembra que tengo, prefiere el jazz, la balada y la musica instrumental ligera, que en Cuba le llaman «moderna o popular». Y el mayor, prefiere la balada romantica y la musica instrumental.
    La musica ya no es lo que era. Cualquiera es cantante y cualquiera es compositor de Rap o Regueton: la mediocridad en su salsa.

  6. Orland dice:

    Me gustaria escuchar oponiones de si le quitaron el Grammy a despacito

  7. Traviata dice:

    Yo creo que ese tema con el que comienzas el post no es ni de los más malos. Yo he oído cada cosas. Lo que pasa es que ya los músicos están cansados de ganar poco con canciones elevadas, con música buena, si saben que dos acéfalos como Yomil y El Dany están ganando millones y un chiquillo recién salido del cascarón como Diván tiene mil jevitas detrás y un desagradable como Osmany García se autoproclama la voz y vive a todo trapo en Miami. Con esos referentes comerciales que ademas lo que hacen es cantar arriba de un background, hay que ser muy firme en sus concideraciones musicales para no claudicar. Los músicos como todos los cubanos quieren vivir como personas. Y por eso hacen lo que hacen, sopa como tu dices ahi. Sopa sin pollo pero que se vende rápido. La gente recuerda a Beny Moré y recordará a Silvio, a Pablo, a Noel Nicola, a Chucho, pero seguro seguro que Chocolate no pasara a la historia de la música cubana. El tiempo va a poner las cosas en orden.

  8. Rotilda Lopez. dice:

    Y quien es es Descemer, nunca lo he oido mentar. Yo prefiero Alicia Keys o en espanol Concha Buika.

  9. JOSE dice:

    Y las letras de algun que otro regueton, es como para taparse los oidos: letrina, o en el peor de los casos, «un escusao» maloliente. Ya lo dijo el musico Willy Colon, refiriendose a estos nuevos sonidos marginales: «esto no es musica, sino ruido y del malo».

  10. Magalys dice:

    Excelente comentario!!! Concuerdo ciento por ciento, le pasó a mis ídolos, Serrat, entre ellos

  11. ¡Quién escribió esto!…
    Mis más profundas felicitaciones para el escritor de este artículo o crítica. Pues si los músicos padecen la enfermedad de la frivolidad y la epidemia del mercado, los críticos cubanos padecen la enfermedad de la generalización y la autoprotección. ¡Menos mal que todavía hay quien llama por sus nombres a los frívolos y la mala música! Porque en Cuba lo que se usa es la generalización, la despersonalización «cósmica», eterea. Muchos críticos, muchos estudiosos, muchas vacas sagradas… pero ninguna de esas vacas sagradas le llaman al pan pan y al vino vino. El amiguismo, el temor, la autoprotección, no sé; lo que sí sé es que no hay falta de conocimientos y ni herramientas para separar lo que es bueno y lo que no sirve, y llamar a los frívolos y mercaderes por sus nombre. Hay que leer la prensa escrita, los periódicos incluso de todas las provincias, revistas y todo, hay que leer cubadebate y otras plataformas, la moda es la generalización y la disolución de la jerarquización artística y cultural. Si se pudieran sacar tres de cada diez críticas de arte que señale nombres y apellidos sería demasiado. Oremos porque abunden estas críticas.

  12. JOSE dice:

    Magalys, Ud tiene muy buen gusto musical. Joan Manuel Serrat tambien es mi cantautor favorito, no de ahora, sino desde Mayo de 1973, cuando se presento en el Amadeo Roldan de La Habana con 12 musicos y 2 horas de concierto, con canciones suyas, poemas de Miguel Hernandez, de Antonio Machado y de Leon Felipe. Todo bajo la batuta de su inseparable amigo Ricardo Miralles, su arreglista y director musical de toda la vida. Desde entonces, Serrat es el Rey, con mayuscula. Tuve el gusto y el honor de conocerlo en persona durante los Juegos Olimpicos de Barcelona 92, a los que asisti como un turista anonimo. Serrat es sencillez, humildad, talento, voz, carisma, austeridad y humanidad. Es un gigante en calidad humana, pero tambien en calidad artistica ( voz, musica y letra ) . Durante mi paso por la radio musical FM conoci artistas grandes en popularidad y talento de habla hispana, pero tambien mediocres con infulas que no llegaron a buen puerto. Entre los pocos que han sobrevivido a la desaparicion de las disqueras y hoy pueden darse el lujo de grabar un disco, muy a pesar de tener mas de 5 decadas de vida artistica, esta Joan Manuel Serrat, nacido en El Poblet, Badalona.
    Sus conciertos en Argentina, Madrid, Barcelona, Chile, Mexico DF o en Miami, son «sold out» ( todo vendido ) . En cambio, Julio Iglesias, hoy por hoy, solo llena una discoteca. En verano cancela presentaciones porque no vende ya ni la mitad de un teatro.

  13. Sonny dice:

    Creo que Mana anda por esa vuelta tambien jaja

  14. camarero dice:

    hoy salió una entrevista a descemer bueno en el periódico granma que me hizo recordar este post… este es el vínculo, por si alguien quiere leerla… reconoce que montó su fábrica de sirope…

    http://www.granma.cu/cultura/2018-02-25/no-hay-que-temerle-al-exito-25-02-2018-19-02-32

  15. Rafael Guillén dice:

    No hay que ser muy ducho en el tema para entender que su crítica es destructiva y mal intencionada. No sé quién, ni por qué, pero es evidente que alguien quiere «castigar» a Descemer Bueno con este escrito hecho por encargo, que de paso avisa a Diana Fuentes y Qva Libre que están en la mira. Quizás para justificar políticas de difusión de la radio y la televisión, quizás para justificar decisiones y premios otorgados por algún jurado, no sé; pero sus palabras buscan dañar la imagen del artista; no sé con qué objetivo.
    Hacer lo que hace Descemer no es sencillo, ni lo hace cualquiera; y aunque usted crea que son “canciones de dos días”, tendría más cuidado antes de decir que es un disco “por el que seguramente no será recordado”. Una colaboración internacional correcta y podemos estar presenciando otro exitazo mundial, con Descemer nunca se sabe.
    Recuerde que es un artista reconocido nacional e internacionalmente, con millones de seguidores en las redes sociales, millones de reproducciones en Youtube, premiado nacional e internacionalmente en múltiples ocasiones; en fin, un artista de éxito. Un artista que compone la canción de moda o la canción profunda con la misma pluma, simplemente su trabajo es admirable.
    «El problema» es que usted y quien le encargó este escrito, deben entender que el artista tiene que vivir de algo. Que el artista, al igual que todos quiere vivir bien y prosperar, que seguramente además tiene una familia que sustentar. Usted sutilmente sugiere una involución hasta las raíces, para producir algo supuestamente auténtico, sin conocer cuántos sinsabores encierran esos tiempos en la experiencia del artista. Es lamentable que por lo general se juzgue a una persona y sus decisiones sin conocer los detalles más importantes de su historia.
    Recuerde, «…no solo de pan vive el hombre; pero sin pan, se muere”

  16. pepe dice:

    Guillén es el más acertado comentario

  17. cubaicani dice:

    Este Rafael Guillén debe ser, por el corte del comentario, el mismo productor de Descemer Bueno que publicó una réplica más ácida que el ácido clorhídrico y en la que luce tan herido que despotrica de la autora del post, endilgándole intenciones que ni por asomo se ven en el escrito. Defender Cuba y su cultura es también criticar lo que la empaña, cosa que no tantos por ahí hacen.
    A Descemer no le hace falta que lo defiendan, lo ha dicho él mismo. A Gisselle Morales tampoco, pero quien la conoce sabe que ni es de las periodistas que se dejan encargar cuando se opinión se trata, ni es una improvisada en lo que hace. Zapatero, a su zapato.

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